Control de la legionella

La contaminación biológica de los sistemas de refrigeración es un problema que puede llegar a ser muy grave en algunas instalaciones. El conocimiento de sus causas y la implantación de un tratamiento adecuado es fundamental para conseguir un funcionamiento óptimo.

Los sistemas por donde recircula agua pueden dar lugar al crecimiento de diversos tipos de microorganismos, ya que es fácil encontrar las condiciones ideales para su desarrollo. Normalmente en estas zonas el agua está saturada de oxígeno, expuesta a la luz solar con temperaturas que oscilan, aproximadamente, entre los 30ºC y los 60ºC, con un pH entre 6 y 9, lo que asegura nutrientes abundantes y un entorno apropiado para la vida microbiana.

Aunque en algunos sistemas estas condiciones se cumplen solamente de forma parcial, sin embargo, también se observa en ellos la presencia de microorganismos que se encuentran formando biocapas, o lo que se denomina, biofilm.

Estos biofilms pueden llegar a interferir en el flujo de agua que circula a través de los intercambiadores de calor y en las conducciones, con lo que la transferencia de calor se dificulta, puede aparecer la corrosión y el deterioro en general de las instalaciones.